Fue el contrapunto a una buena tarde de fútbol la vivida el pasado sábado en Gobela. El partido había llegado al descanso con empate a uno tras haberse adelantado el conjunto blanquiazul y a los seis minutos de la reanudación el Arenas se había puesto por delante. Tres minutos más tarde, en pleno vendaval del Arenas, un balón colgado al área era disputado por el delantero local Aitor Ramos que no llega a rematar y con la jugada que acaba con el mismo en el larguero a disparo de Txopi tras despeje del portero visitante. En esa acción Ramos cayó fulminado fuera del terreno de juego con muestras claras de dolor. Según fueron pasando los minutos ya se sabía que la lesión podía ser grave y la inquietud se agrandó cuando, por su propio pié y con el brazo en cabestrillo, se dirigió a la salida del campo para ir en ambulancia. La lesión se confirmaría con un desplazamiento de clavícula que afectó a varios ligamentos y que le dejará dos meses en el dique por lo que será baja para los play-off.
Además de la mala suerte de lesionarse, para el Arenas es una baja más que importante ya que Aitor Ramos era el jugador quizás más en forma del equipo a estas alturas. Llevaba un año 2014 pletórico y se había echado al equipo y a la afición a sus espaldas más aún en momentos de dudas creados a raíz de la destitución de Javier González Etxebarria como entrenador del equipos. Si los delanteros del Arenas habían bajado algo su rendimiento en los últimos meses, Ramos estaba allí para sacar lo mejor de él y de sus compañeros. Será un baja que esperemos no se note en exceso en unos play off que parecen empezar gafados para el Arenas si recordamos la lesión de Ian Uranga en el primer partido de la misma fase de ascenso el año pasado en Talavera dela Reina.
Además el Arenas pierde un hombre de experiencia. El mes que viene cumplirá los 29 años y en su haber suma cuatro play off de ascenso de forma consecutiva. Llegó a militar en el Athletic la temporada 2007-2008 con Caparrós en el banquillo y como rojiblanco disputó cinco partidos de liga y dos de copa. El de Bermeo estuvo en las categorías inferiores de Bermeo, Santutxu y Athletic. En categoría senior estuvo en el Santutxu antes de recalar en el Lemona, Bilbao y Athletic y el primer equipo bilbaíno. Luego fue cedido al Ecija antes de volver al Barakaldo, pasar por el Laudio y recalar en el Arenas donde cumple su segunda temporada y donde acabará contrato el mes que viene.
El pasado lunes fue operado con éxito en menos de noventa minutos de intervención y ahora sólo piensa en apoyar al equipo arenero desde la grada y poder celebrar con sus compañeros el ascenso a la división de bronce del fútbol español.
Con el atacante del Arenas pudimos hablar ayer de cómo se encuentra y de la actualidad de un equipo que se ha vuelto a ilusionar por disputar un play off de ascenso.
Fuente: http://www.getxo.net/es/kirolberri/noticias/1213
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